Apagón en el BiblioReto

Por Ratoner

El bajel pirata BiblioReto surca el Mar Belegaer cuando, de repente, un apagón sume el barco en tinieblas. Las velas del farol se apagan, y la tertulia nocturna en cubierta comienza bajo un cielo sin estrellas. El Capitán Brujillas, palpando su espada, gruñe: «¡Por las barbas de Ulmo! ¿Qué es esto? ¿Un hechizo o un motín de las sombras?»

Oscarina, la zíngara mapeadora de palabras, enciende una vela con mano temblorosa. «No es magia, capitán, es un fallo. Pero mira: sin luz, los libros en la bodega parecen susurrar más alto. ¿Y si la oscuridad nos enseña a escuchar?» dijo tejiendo calma entre el crujido del maderamen.

Imagen: Grok

Ratoner, el ratón cuántico, brinca sobre un barril, sus ojos brillan como luciérnagas. «¡Escuchad! En una dimensión, la luz es solo una distracción. Este apagón es una aventura: ¿qué historias surgen cuando no vemos el papel?» propone, olfateando un libro cercano.

«¡Historias! ¡Yo quiero mi barco funcionando!» ruge Brujillas, pero su tono esconde curiosidad. «Oscarina, ¿qué dice tu mapa de esta negrura?» Ella sonríe. «Es un mapa en blanco, capitán. La oscuridad nos obliga a inventar. Contemos lo que no vemos.»

La tertulia cobra vida en la penumbra. Oscarina narra un cuento de sirenas ciegas; Ratoner, una fábula de un faro cuántico; Brujillas, una balada de tormentas vencidas. Los libros, invisibles en la bodega, parecen alimentar cada palabra. Cuando un marinero repara el farol, la luz vuelve, pero la magia no se va.

«¡Que los apagones vengan más seguido!» ríe Brujillas, alzando una copa. En el BiblioReto, la oscuridad no es un fin, sino un lienzo para relatos que brillan más fuertes que cualquier lámpara, uniendo a la tripulación en la danza de las palabras.

IA: Grok